Mou prevenido vale por dos

Mou prevenido vale por dos

Cada uno de nosotros manejamos nuestro propio calendario: incluso si estás parado, en el calendario quedan marcadas fechas límites para comenzar a rebajar nuestras expectativas (trabajo por menos dinero; menos cualificado; más lejos de casa; cambio de turnos, etc.). Mourinho también maneja su calendario.

El calendario de Mourinho es distinto al de todos los demás mortales. Mourinho, como Guardiola, o Fergusson, son figuras mundiales. Además, trabajan como entrenadores de fútbol y, como dicen en lenguaje bursátil, hay una gran volatilidad: esta semana puedes ser rey; la siguiente, villano.

El calendario de Mourinho está marcado en números rojos: desfile de victoria o alarma. Y en Navidad anunció lo que podría suceder con sus propias palabras: me gusta la liga inglesa. Anunció y como un capitán de barco preparó el navío para afrontar posibles cambios de viento, o de rumbo.

Un mes después, 25 de enero, Mourinho atravesará aguas tormentosas; o disfrutará de unas horas de vino y rosas. Así será la consecuencia del resultado de la eliminatoria de la Copa del Rey.

El calendario de Mourinho destaca cada temporada los triunfos. Significan estos triunfos reforzar el proyecto. Si los triunfos se tornan en lanzas, debe considerar como víctima salidas airosas.

El primer posible revés, la eliminación de la Copa del Rey (a manos de Barcelona) puede ser el principio del fin. ¿Qué sucede si cae en la Champions League en febrero o en marzo? ¿Qué sucedería si pierde la ventaja en Liga y se ve superado por su perseguidor? Estas son fechas esenciales en la carrera de un entrenador como Mourinho en un gran equipo. Y José Mourinho en su cuaderno de navegación tiene escritas esas fechas: eliminatoria en enero, febrero y marzo; batalla final en abril y mayo.

Si hay triunfos, el proyecto de Mourinho como entrenador del mejor equipo del mundo saldrá reforzado. Si no hay triunfos, habrá sentencia.

De momento, el Bernabéu se ha hecho oir: en la victoria del Real Madrid sobre el Ath Bilbao que significa un colchón de cinco puntos sobre el perseguidor, el público del Bernabéu acalló entre protestas y silbidos a quienes coreaban como cada domingo "José Mourinho."

El madridismo la noche del domingo 22 de enero, puso la pelota en el tejado de Mourinho. Sobre los hombros del entrenador está ahora lo que Mou planificó para su calendario: primera posible eliminación de un objetivo básico del club, la Copa del Rey.

Por esto, asistimos estos días al fuego cruzado entre público, periodistas, jugadores y entrenador.